Buscando la vieja entrada de La Cuchara sobre el Paraíso del Jamón en Google me he dado cuenta de que el post aparece en segundo lugar en el buscador. Toda una lección sobre lo que puede ser la publicidad negativa de un sitio humilde como este para un ¿emporio? con cinco locales bastante grandes situados en sitios claves de Madrid.

En La Cuchara no solemos hacer nunca críticas negativas, o al menos no destructivas. “Que chicos más complacientes” seguro que habrá pensado más de uno. Y no es eso, acudimos, como todo el mundo, a sitios que nos parecen infectos, comemos aceite mil veces reciclado muchas más veces de las que nos gustaría y nos tapamos la nariz en cuartos de baño dignos del de Trainspotting como el más pintado. Sin embargo la filosofía que ha primado ha sido siempre la de intentar recomendar lugares interesantes. No somos críticos culinarios ni nada por el estilo sino un grupo de amigos que cuenta sus experiencias en bares y restaurantes.

El caso paraíso del jamón fue especial porque nos sentimos tan engañados…¡Si hasta nos sirvieron una “fanta de garrafón”!

Y no es que un tiempo después haya decidido regodearme en aquello no, es que desde entonces han sucedido algunas cosas muy bizarras con estos establecimientos que merecen que os las contemos también.

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Hernani 53
Cuatro Caminos, Nuevos Ministerios

A fuerza de ser sincero os voy a decir que no había quórum entre los cuchareros en el hecho de cucharizar este local. Cómo de todas maneras soy el que más veces ha estado en él voy a escribir la crónica intentando trasladar los peros y los matices de lo que hemos comentado sobre él.

Situado en la calle Hernani, en una zona rica en tabernas, en ese lugar un tanto impreciso entre la zona de cuatro Caminos y la castellana (está muy calle abajo), en su ambiente por las mismas se mezclan paisanos de ambos ambientes: chicos de buena familia y gentes de barrio.

Se trata de un local de ambientación muy taurina: si se te puede atragantar una bandera de España o un exceso de tauromaquia piénsatelo dos veces, quizá no sea tu lugar.

La Consentida está dividida en dos locales contiguos, los dos con unas pocas mesas (en ambos se comparte cocina y se puede cenar de la misma carta), aunque en el de más arriba hay un ambiente más de taburete (por cierto que tienen buen hacer tapero con las cañas). Si tu intención es esa, tapear un poco más que cenar, debes tener en cuenta que la caña es en realidad un doble y su precio es de 1,60, que no está mal para el tamaño del vaso pero que vaya, no es una caña.

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Regueros 5.
Alonso Martínez


www.buhoreal.com

Hace tiempo solíamos hablar por aquí no sólo de restaurantes y tascas, también lo hacíamos de bares de copeo. Más tarde, supongo que porque nos hacemos viejos, fuimos centrándonos más en aquellos locales especializados en agasajar el gaznate con elementos sólidos, aunque nunca hemos dejado de incluir de vez en cuando algún local tranquilo donde tomarse una copilla charlando. Suelen además tener cierta oferta gastronómica “de corta intensidad”.

Hoy vamos a incluir en catálogo un bar de la zona de Alonso Martínez muy alejado de los locales para el entretenimiento adolescente que abundan por allí. Un pequeño local que lleva ya años llevando la música a la noche madrileña. Este es el principal mérito del sitio: casi cualquier día de la semana puedes acudir a tomarte una cervecita mientras ves música en directo.

El sitio es un bar musical primordialmente, allí deberás llegar cenado, pero si te entra un poco de gusa algo pueden hacer por ti. Clásicas de allí son las empanadas argentinas (como el dueño, Darío, si no me equivoco).

Los cantantes que allí escucharas son cantautores las más de las veces, a veces grupitos pop. Los precios están en torno a los ocho euros la entrada con consumición.

Un local con encanto donde aún se pasan a tocar gentes de cierto éxito una vez han conseguido despegar, lo cual interpreto como una buena señal.

C/Alvarado 11 (esquina con Topete)
Alvarado, Cuatro Caminos
915353953

La Taberna de Domínguez es sobre todo un sitio agradable de buen trato y variada oferta a la hora de comer algo. No he dicho poco lo sé, lo que quiero expresar es que es una taberna de barrio más que interesante.

Está situada en la calle Alvarado esquina con la calle Topete (al lado de Cuatro Caminos, en lo que llaman el barrio de Bellas Vistas). En sus servilletas reza que tienen algún otro establecimiento pero yo hoy os hablo sólo de este que es al fin y al cabo el que conozco.

Se trata de un sitio bonito, decorado por fuera y por dentro con azulejos pintados, bien montado, aunque sin perder el sabor a taberna, que siempre tiene su encanto. La carta es muy amplia aunque si tuviera que ponerle un pero sería que no siempre tienen las cosas más sofisticadas que tienen en la carta.

Recomiendo el bienmesabe, una buena ración de cazón rebozado. También son muy típicas del local las raciones de patatas a la brava y derivaciones (mixtas, con carne, etc), las gambas a la gabardina o la oreja. Muy ricas también son las tortillas variadas, pequeñas tortillas unipersonales con salsa brava como las míticas del local Las Bravas o en otras modalidades (con picadillo, con morcilla, con gambas…). Las croquetas están bien aunque un poco escasas y creedme que la carta es tan amplia que no me atrevería a seguir recomendando platos concretos con todo lo que aún me queda por probar.

Se me olvidaba decir que es un sitio de cerveza bien tirada (las cañas rebosantes como dicta la técnica madrileña) y tienen la buena costumbre de corresponder con tapita a tu petición cañera. Tiene además un menú del día muy interesante a 8,80 euros. Este no lo he probado pero suelen incluir platos tipo rabo de toro.

Una taberna bonita que lo mismo sirve para tomar unas cañas, comer de menú o tomarse unas raciones.

Santa Taresa, 1
Alonso Martínez
+

Ya son dos o tres veces dilatadas en el tiempo las que he comido en este establecimiento en las inmediaciones del bulevar de Alonso Martínez y mi impresión ha sido siempre la misma ¡qué pizzas más buenas!
Se trata de un pequeño pero coquetuelo establecimiento argentino situado en la calle Santa Teresa número 1. Ten cuidado si lo buscas porque no tiene letrero en la puerta (qué yo haya visto) y hay que bajar un poquito la calle pese a estar en el primer número de la misma.

La carta se compone de una sección de ensaladas más o menos normales, más o menos de orientación italiana (con mucha presencia de quesos, rúcula, etc.), de especialidades típicas de un argentino (chorizo criollo, entraña…) y sobre todo pizzas.

Las pizzas se dividen en dos categorías, las de molde, vaya las normales, y las hechas a la piedra, muy ricas. Son generosas en queso y de masa bien crujientita. A mi me parecen excelentes.

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