Las que faltaban:
19 días y 500 noches 1999
De Purísima y oro
Aquí, nos encontramos con la única canción de temática directamente taurina del cantautor, Manolete y la España deprimida y reprimida de después de la guerra configuran una canción maravillosa.
Para primores galerías Piquer,
para la inclusa niños con anginas,
para la tisis caldo de gallina,
para las extranjeras Luis Miguel.
Para el socio del limpia un carajillo,
para el estraperlista dos barreras,
”Maestro, le presento a Lupe Sino,
lo dejo en buenas manos, matador”-
Y, luego, el reservao en “Gitanillos”,
y, después, la paella de “Riscal”,
y, la tarde del manso de Saltillo,
un anillo y unas medias de cristal.
”Niño, sube a la suite dos anisetes,
que, hoy, vamos a perder los alamares”-
de purísima y oro, Manolete,
cuadra al toro, en la plaza de Linares.
Dímelo en la calle 2002
El café de Nicanor
Estaban Gámez el astronauta,
Gastón el flauta, Mari la tetas,
el novillero poeta con su mujer,
el pobre don Agapito
y un camellito sin dientes
paisano de un primo hermano
de algún pariente lejano
de Ana Belén.
Semos diferentes
El niño de Scotland Yard
torea regular
y por consiguientes
Sherlock Holmes se acompleja,
para cortar las orejas
hay que tenerlos como Torrente.
Diario de un peatón 2003
Ay, Calixto
Para colmo mi Calixto
por lo visto
no le sobraba
afición
como varón;
toreaba
fuera de cacho
no se apretaba
los machos
ni se gustaba
ni se cruzaba
ni paraba
ni mandaba
ni templaba
ni remataba
faena
y no le daba
a su nena
la alegría
macarena
que el cuerpo de esa morena
sin alma
necesitaba
Canción de cuna de la noche y los tejados
Ley de los sin ley,
rueda de peones para darle jaque al rey.
El bar
de la estación
es un hogar
para mi corazón.
Benditos malditos
Benditos sean…
la novia del torero, los bronquios del torero,
los tristes que se rien de la tristeza,
los ricos sin dinero, los vagos con peraza,
Alivio de luto 2005
Números rojos
traje de luces,
pata de cojo,
cartas y cruces,
números rojos.
Resumiendo
Resumiendo, esto no es un arreglo floral por tu santo,
solo sombras que en noches de insomnio me alfombran el canto,
sobre nuestras cabezas silbaban calumnias, payolas,
mano a mano las fuimos driblando a puertita gayola.